En Teterum nos encanta el té verde... y hablar sobre té verde, pero es que el tema da para rato. Fue el primero en “descubrirse” y quizás cuente con tantas propiedades y beneficios como años se lleva consumiendo. Derivadas de su estudio durante todo este tiempo, cada vez surgen más nuevas aplicaciones y entre ellas está el mundo de la belleza y la cosmética natural, por eso al final te contaremos lo que necesitas para preparar tu propio tónico de té verde.
Bebido, el té verde puede servir como ayuda natural para perder peso, para prevenir el riesgo de algunos cánceres, mejorar el sistema cardiovascular, fortalecer nuestros huesos o potenciar la capacidad de atención. Los polifenoles y la cafeína presentes en este tipo de té lo convierten en un producto muy interesante, igual que su poder antioxidante. Lo mejor de todo esto, es que usado para elaborar productos cosméticos, el té verde sigue aportando todos estos beneficios desde el exterior de nuestra piel.
Rejuvenece tu piel con recetas de té verde
Son muchas marcas las que aprovechan los compuestos del té verde para elaborar algunos productos que podemos encontrar hoy día en las estanterías de grandes superficies, droguerías y perfumerías. Sin embargo cada vez somos más las que nos gusta hacernos nuestras propias mascarillas, cremas y productos caseros, incorporando ingredientes y personalizándolas según nuestras necesidades.
El DIY (do it yourself) se está apoderando de todos los ámbitos posibles, y entre ellos el de la cosmética, abogando cada vez más por productos caseros con propiedades naturales. Entre ellos, el té verde puede ser uno de los grandes aliados ya que usado en cremas, mascarillas y tónicos faciales aporta un alto poder astringente y calmante. Estos factores lo convierten en muy indicado para esas pieles irritadas con cierta tendencia grasa ya que regula la producción de sebo y refresca.Por ejemplo, podremos elaborar nuestro propio tónico de té verde con una taza de agua destilada y un par de cucharadas de hojas de té secas que infusionaremos en este agua. Una vez frío solo tendremos que aplicarlo con un disco de algodón dando suaves toquecitos sobre la piel y podremos guardar el sobrante en la nevera para el próximo uso. A este tónico podremos añadir otros ingredientes para conseguir más beneficios, como por ejemplo manzanilla y limón para un efecto rejuvenecedor.
¿Qué recetas de belleza utilizas tú?
