Hay muchas razones por las que el té blanco se considera un té gourmet en mayúsculas. En otro artículo te contamos las propiedades y beneficios de este té y por qué se puede considerar un potente antiaging. A diferencia de otros tés, el té blanco ya es por definición un té de alta calidad sea cual sea la gama que compras. Esto quiere decir que no hay tés blancos de baja calidad, su forma concreta de producción lo impide. Eso sí, cuando compres té blanco, asegúrate de que realmente estás comprando té blanco. En Teterum aportamos los certificados de los tés para que puedas comprobar el origen y calidad de cada té y sepas qué estás bebiendo. A continuación te explícamos por qué es tan especial el té blanco.
Por la forma en qué se produce
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Como ya debéis saber, todos los tés provienen de la misma planta, la Camelia Sinensis, un arbusto de hoja perenne. Lo que convierte sus brotes y hojas en té blanco, verde, azul, negro o rojo es el método de producción. Según este método el té estará más oxidado, fermentado, tostado o al vapor, etc.
El té blanco es de todos los tés el más fresco. Para empezar sólo se cosechan los brotes más tiernos de la planta. Brotes que aún no se han abierto y aún conservan una fina pelusilla blanca. De ahí viene seguramente el nombre de té blanco, de ese matiz blanquecino que tienen los brotes.
Estos brotes tan tiernos, una vez recogidos, casi no se dejan oxidar y pasan inmediatamente a ser secados al sol lo más rápidamente posible y, además, se dejan secar sólo lo indispensable. De esta forma, este té conserva unas propiedades muy peculiares. Los más importantes son que contienen muy poca teína, y aporta gran cantidad de antioxidantes.
Por su sabor
La forma en que se produce también afecta a su sabor. Para empezar, cuando lo infusionas produce un té de color amarillo muy claro y brillante. El aroma es muy fino y hay que tener buen olfato para apreciarlo. El sabor es muy delicado y no tiene ese final algo amargo de otros tés como por ejemplo el té verde Gunpowder. Tenemos que ir al té verde matcha para tener ese paladar delicado sin amargo final. Pero a diferencia del matcha que tiene un toque dulce, el té blanco es seco y suave.
Como tiene tan poca teína y su sabor es tan fino, lo podemos beber durante todo el día y puede acompañar cualquier comida sin molestarla, sea dulce o salada. Pero a la vez, iremos beneficiándonos de sus propiedades.
Por sus propiedades
Las propiedades de este té son principalmente:
- Baja cantidad de teína: es el té más relajante por que casi no tiene excitantes. Por lo que es ideal para tomar tantas tazas como quieras sin perder la serenidad.
- Muchos antioxidantes: está tan poco procesado que disfrutas de gran cantidad de antioxidantes de la planta. Esto es especialmente útil para neutralizar los efectos adversos de los radicales libres en la piel y en el organismo en general.
También, tomar té blanco habitualmente durante el día te ayudará a ir eliminando toxinas y a mantenerte hidratada.
Los tés blancos que te encantarán
En Teterum tenemos muchos tés favoritos porque el té es nuestra pasión. Pero si de tés blancos se trata, tenemos dos propuestas que no te puedes perder:
Primero el Miss White Rose, un té blanco con bergamota para paladares exquisitos. La bergamota le da un toque revitalizador y refrescante que activa sin perder la calma. El té blanco es un Pai Mu Tan originario de China, uno de los mejores tés blancos que puedes beber dentro de la gama gourmet.
En segundo lugar, pero no por ello menos rico, el té blanco con manzana asada Forever Young. Ya os podéis imaginar por qué lo llamamos así. Desestresante y protector de la piel. Combina el sabor de dos tés, el blanco y el verde con rica manzana asada y canela. Ároma envolvente y sabor con cuerpo sin perder la finura del té blanco, pero con más carácter y algo dulce. ¡Pruébalo y nos cuentas qué te ha parecido! Seguro que te encantará.
